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Arquitectos: Duarte Fournies Arquitectos
- Área: 120 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Marcos Zegers
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El terreno se ubica en un bosque del Valle de las Trancas (Cordillera de los Andes), en la comuna de Pinto, zona central de Chile. El clima en esta zona presenta condiciones extremas. Nieve y lluvia conforman el paisaje en invierno, mientras que en verano son comunes los cielos despejados y las altas temperaturas.
Alejandra vivirá sola en este lugar remoto, recibiendo visitas esporádicamente. El programa solicitado incluye una habitación principal, dos habitaciones para visitas, living, comedor y cocina.
Considerando la ocupación de la vivienda y el presupuesto disponible, decidimos integrar todos los espacios de uso diario en una sola área central, y ubicar las zonas de visitas y servicios en los extremos. De esta manera, optimizamos los metros cuadrados construidos, minimizando las superficies de circulación y logrando mayor eficiencia en calefacción e iluminación.
El programa completo se desarrolla en 100 m² interiores y 20 m² semi-exteriores destinados a estacionamiento y logia. El acceso principal se plantea desde el sur, a través de un hall que distribuye las habitaciones / baño de visitas y el espacio central. Se considera un acceso secundario de servicio que conecta el estacionamiento y la logia con el interior de la casa, evitando aumentar los metros cuadrados construidos en circulaciones exteriores protegidas.
El espacio central se proyecta con mayor altura de piso a cielo, solucionando el escurrimiento de aguas lluvias y generando un lugar de mayor amplitud, aportando metros cúbicos a un lugar de metros cuadrados acotados. Aquí se desarrollan living /comedor/ cocina y habitación principal, con un sistema de puertas plegables que separa el ambiente privado del público cuando sea necesario.
La mayoría de los muebles de apoyo, tanto de la cocina como de las habitaciones, se ubican hacia la fachada sur, configurando una imagen hermética con vanos puntuales. Por otro lado, la fachada norte se trabaja con ventanales corridos para obtener un buen asoleamiento y vistas al Valle.
Toda la estructura es de madera, revestida interiormente con madera de eucalipto y hacia el exterior con paneles metálicos emballetados. Se trabajó con pocas materialidades para lograr una imagen neutra, resaltando el paisaje natural del entorno.
En todos los vanos de las fachadas se consideran paneles correderos con el mismo revestimiento metálico de la casa, pero perforados, solucionando un tema de seguridad y de protección climática.